SUGERENCIAS PARA AYUDARLE A ELEGIR
Estos consejos pueden ayudarle a sentirse más seguro a la hora de tomar una decisión entre una Casa de reposo o cuidador:
Primer paso: determinar las necesidades del miembro de la familia.
Antes de tomar cualquier decisión, debe conocer las necesidades exactas de su familiar. Puedes empezar por hacer una lista de todo lo que necesita la persona mayor: compañía, supervisión, ayuda en las tareas domésticas, higiene, preparación de comidas, atención médica, etc. Esto le dará una idea clara del nivel de atención necesario. Además de conocer las necesidades de la persona a la que se va a cuidar, es importante conocer la presencia y la disponibilidad de los miembros de la familia, por ejemplo, la distancia al domicilio de la persona mayor, los horarios de trabajo.
Segundo paso: evaluar las ventajas e inconvenientes de ambas opciones.
ANÁLISIS DE LOS PROS Y LOS CONTRAS DE LAS DOS OPCIONES
Tanto los servicios de enfermería como los de atención domiciliaria ofrecen algunas grandes ventajas, pero ambos tienen también desventajas, que deben ser evaluadas en función de su situación específica.
Atención domiciliaria
Pros:
Permite a la persona beneficiarse de una atención individualizada que puede adaptarse a sus preferencias y necesidades únicas.
La persona mayor puede permanecer en su propio hogar tanto como sea posible.
La persona mayor, junto con sus familiares, tiene la oportunidad de elegir al cuidador familiar que le atenderá.
La persona mayor, que recibe los cuidados de una sola persona, se siente más cómoda.
El cuidador familiar crea una relación de confianza con la persona mayor y su familia.
La persona mayor y su familia pueden elegir entre diferentes tipos de servicios de atención familiar: por horas, en régimen de internado, atención nocturna, etc.
La atención domiciliaria puede ser más barata.
Hay concesiones para reducir los costes totales.
Contras:
Cuando se requieren cuidados las 24 horas del día, hay que contratar a dos cuidadores familiares y los costes pueden ser elevados.
El cuidador familiar que vive en casa necesita su propio espacio.
El cuidador familiar tiene derecho al día libre, a las horas libres y a los días festivos que puedan requerir la presencia del familiar.
El hogar de la persona mayor puede no ser seguro ni accesible para las ayudas.
Casa de reposo
Pros:
Proporciona un entorno controlado.
Dispone de espacio adecuado para ayudas, sillas de ruedas, baño asistido.
Se organizan actividades de socialización y rehabilitación.
Proporciona personal médico y asistencial.
Propone una nutrición adecuada para las patologías, por ejemplo, la disfagia.
Contras:
Presencia de personal para múltiples huéspedes.
Organización de la jornada en función de las necesidades organizativas del centro.
La calidad de la atención varía según los centros.
Desorientación de la persona mayor alejada de su entorno familiar.
Costes más elevados.
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